Ningún tipo de negocio está al margen de sufrir un contratiempo. Desde daños materiales en los equipos que necesitas para el desarrollo de tu actividad hasta pérdida de las existencias, problemas en las infraestructuras o dificultades financieras. Parte de tu responsabilidad como empresario es asumir que los riesgos existen y recurrir a las herramientas necesarias para minimizarlos.
Protege tu negocio con el tipo de seguro para empresas que más te conviene
¿Cuáles son las particularidades de la actividad que desarrolla tu empresa? ¿Trabajas con obras de arte? ¿Empleas materiales o maquinaria específica? ¿Se trata más bien de un trabajo de oficina y con equipos informáticos? Las características de tu negocio van a ser las que determinen cuál es el tipo de seguro para empresas que mejor se adapta a tus necesidades. Pero antes de entrar en aspectos más concretos, te conviene saber que hay al menos tres tipos de póliza que siempre resultan de interés para cualquier negocio.
- Seguros de responsabilidad civil: cubre los daños materiales y personales que puedas ocasionar a terceros en el ejercicio de tu actividad. Es un seguro de carácter obligatorio para determinadas empresas y muy recomendable para todos los negocios en general. Es un tipo de producto que se puede adaptar a ONGs, empresas clínicas, industrias químicas, etc.
- Seguros para autónomos: este producto te garantiza mejores prestaciones en momentos tan importantes como la jubilación, las bajas médicas o la baja por maternidad. Cotizando por la base mínima las prestaciones que ofrece la Seguridad Social a los autónomos son muy limitadas. Este tipo de seguros suple esas carencias básicas.
- Seguros para pymes: protege tu empresa frente a robos, averías, desperfectos causados por el mal tiempo y problemas derivados de desarrollo de tu actividad. Estas pólizas ofrecen amplias coberturas a las empresas que se dedican a la fabricación, almacenaje y manipulación de bienes.
Personaliza tu seguro para empresa con un producto más específico
Aparte de los tres seguros básicos (cuando no obligatorios) con los que deberían contar todas las empresas y profesionales autónomos, en ABLE Seguros te ofrecemos otras opciones más específicas para adaptarnos a las particularidades de tu negocio.
- Seguros para oficinas: recuperar el ritmo de actividad de tu negocio después de algún incidente puede resultar muy costoso. Este seguro no sólo cubre los desperdicios sino las pérdidas económicas de una posible demora mientras el problema se soluciona.
- Seguros de bajas: complementa las prestaciones económicas de la Seguridad Social en los momentos en que más necesitas. Una baja médica ya no tiene por qué traducirse en una disminución de tus ingresos.
- Seguros de responsabilidad civil de administradores y directivos: no pongas en riesgo tu patrimonio y el de tu familia. Este seguro responde por ti en el caso de haber cometido algún error en el desarrollo de tus funciones directivas.
- Seguros de averías de maquinaria: ¿has tenido que frenar drásticamente la producción por un problema con la maquinaria? Minimiza los costes y los tiempos necesarios para una reparación.
- Seguros de equipos electrónicos: los equipos electrónicos e informáticos son el motor de muchas empresas. Necesitas estar preparado frente a cualquier fallo técnico o humano.
- Seguros de museos, galerías y exposiciones: el valor de algunas obras de arte es incalculable. Cuando trabajas a diario con este tipo de materiales la seguridad es un aspecto que no tiene precio.
- Seguros de comercios: tu negocio familiar de ultramarinos o tu pequeña tienda de moda no pueden permitirse el lujo de cerrar unos días por culpa de una avería. Adelántate a los problemas con este tipo de pólizas.
- Seguros de vehículos industriales, comerciales o agrícolas: cuando el vehículo es una herramienta de trabajo, éste se convierte en uno de los puntos vulnerables de tu actividad. No detengas nunca la marcha y contrata las coberturas específicas que necesitas.
- Seguros de talleres de reparación de vehículos: el material de tu taller, la seguridad de tus empleados y la garantía de un trabajo bien hecho deben ser tu prioridad. No permitas que un contratiempo emborrone tu marca y la confianza de tus clientes.
- Seguros de accidentes de convenio: una plantilla satisfecha con sus coberturas sanitarias es una plantilla contenta. Invierte en el bienestar de tus trabajadores en los momentos más necesarios.
- Seguros de transporte de mercancías: por mucho que tengas que desplazar la mercancía de un punto a otro del mapa, lo harás con total tranquilidad si dispones de un seguro que te proteja de los riesgos asociados al transporte de bienes.
- Seguros de cancelación de espectáculos: ¿tu evento se ha suspendido por una huelga en el sector? Con este producto correrás con el coste de cualquier eventualidad que afecte a tus espectáculos y al público asistente.
Deja de obsesionarte con los riesgos y concéntrate en todo aquello que hace crecer a tu empresa. En ABLE Seguros trabajamos para que tu proyecto siga avanzando sin que los contratiempos te frenen en ninguna circunstancia.